Dos años después de derrotar a la secta satánica liderada por la niñera Bee, Cole trata de olvidar su pasado para centrarse así en sobrevivir al instituto. Cuando viejos enemigos regresan, Cole no tendrá más remedio que volver a enfrentarse a las fuerzas del mal.
Secuela de esa gran película llamada La niñera (2017), pero con cambios de tono y más personajes. Aunque está en un nivel inferior al de su antecesora, la simpatía de la historia, el carisma de los actores y una banda de sonido muy bien utilizada terminan por generar una película ligera y simpática a la vez. A pesar de ser muy sangrienta, el sentido del humor se impone y una mirada amable la vuelve inesperadamente luminosa aun con su tema y los chorros de sangre que saltan por doquier. Se recomiendo ver La niñera para disfrutar más de esta película. Ambas están dirigida por McG, el mismo de los films de Los ángeles de Charlie del año 2000 y 2003.