Peliculas

La voz de la igualdad

De: Mimi Leder

El cine industrial de Hollywood está dando una respuesta a la nueva ola del feminismo. Como suele ocurrir en cualquier cine industrial, esos cambios tienen que ver con la especulación comercial, los cambios culturales y, en los mejores casos, con una genuina convicción. Mimi Leder, la directora de La voz de la igualdad es una de las mujeres que logró avances y cambios para la mujer en el cine norteamericano de alto presupuesto. Como directora, y también como productora, dejó una marca tanto en cine como en televisión. Esta vez, con La voz de la igualdad consigue su mejor película, y vuelve al largometraje de cine luego de bastante tiempo en televisión, donde fue la responsable de varios grandes títulos, como por ejemplo The Leftovers.

On the Basis of Sex (título original de La voz de la igualdad) se basa en la vida de Ruth Bader Ginsburg, desde que comienza sus estudios de abogacía hasta que consigue un caso que puede cambiar para siempre la historia de la discriminación de género en las leyes norteamericanas. Ruth Bader Ginsburg tiene una carrera de enorme importancia en Estados Unidos, pero se ha vuelto un poco más famosa por este film y también por el documental RBG, también del 2018, dirigido por Betsy West y Julie Cohen. Su fama la precede, pero ahora es mucho más conocida.

Con una narración de absoluto clasicismo y sin ninguna novedad a nivel formal, la película consigue, sin embargo, movilizar al espectador más indiferente y emocionar como pocos títulos lo han hecho en los últimos años. Tal vez se necesite un poco de conciencia feminista para valorar la historia de Ruth Bader Ginsburg, pero lo cierto es que las escenas de la película, justamente por su narración clásica, permite entender todo lo que la protagonista logró en su carrera.

La historia arranca en 1956 y llega hasta principios de la década del setenta. Ruth Bader Ginsburg es una heroína feminista inteligente, valiente y tenaz, pero su matrimonio y su familia también comparten sus sueños y sus aspiraciones. Con las tensiones de los cambios de época, con los avances y los nuevos conflictos, la película se conforma con exponerlos con oficio y eso le alcanza y le sobra. Desde los primeros problemas de pareja en la década del cincuenta, hasta los problemas con la hija de la década del setenta, el film muestra la evolución del feminismo.

Hay varias escenas de enorme emoción, como aquella en la que Ruth descubre, en un momento cotidiano, que su hija vive en un mundo mejor para la mujer de la que ella vivió cuando tenía la misma edad. Hay otros momentos para sentirse movilizado, pero es mejor no anticiparlos. La película recupera una historia que no muchos conocen fuera de Estados Unidos, pero que es tan universal como lo son los derechos de los seres humanos.