Peliculas

Subferatu

De: Patrick Penta

La batalla por llamar la atención Nosferatu (2020) la gana con su título. En una recorrida por miles de títulos, no cuesta mucho detenerse frente a esta película. Ayuda también un afiche, con un submarino y unos dientes de vampiro, bien diseñado.

La película se desarrolla casi completamente en un submarino alemán de la Segunda Guerra Mundial. Adolf Hitler acaba de morir, y el comandante del submarino (Martyn G. Krouse) quiere entregarse en el puerto de Nueva York. En medio de una tormenta terminan rescatando a cinco náufragos de un yate. El capitán Gavin McCloud (Mike Dooly) y cuatro jóvenes que habían salido con él a dar un paseo pero fueron sorprendidos por el mal tiempo.

Los nazis no saben que han viajado en el tiempo y son incapaces de entender quiénes son esos personajes. A su vez McCloud y sus pasajeros entienden más rápido lo que pasó, aun siendo absurdo. Nazis, viajes en el tiempo y unos náufragos que parecen herederos de la serie La isla de Gilligan. Y aún falta el detalle final: vampirismo. Subferatu se suma a una larga lista de películas que se nutre de mezclas absurdas pero atractivas, promesa permanente de pasarla bien aunque en general la idea no pasa del chiste resumido en una oración.

No estamos frente a una película de terror, por supuesto. No es sangrienta tampoco, no es un film perturbador en ningún aspecto. Una comedia como bastante parodia, un film independiente hecho con mucho cuidado, sin burlarse jamás de la forma en la cual fue hecho. Autoconsciente sí, pero jamás tomándose en broma su calidad. Los actores son muy superiores a lo que un presupuesto diminuto como este suele tener y Mike Dooly como el Capitán McCloud realmente sostiene sobre sus hombros la historia. Algunos secundarios tienen buenos momentos y algunos chistes funcionan de forma genuina. La dirección de arte reconstruye de forma un eficaz el interior de un submarino y aunque se adivina que es un disparate, la fotografía termina de volver creíble un trabajo muy prolijo.

Subferatu (por favor, que buen título, lo escribo y me río) incluye escenas de Nosferatu para el prólogo del film y tiene las esperables referencias cinéfilas que una comedia como esta suele ofrecer. A veces estas películas pequeñas, de calidad muy limitada y presupuesto nulo, respiran una simpatía mayor a las superproducciones que aunque disimulen mucho terminan mostrando que no tienen ideas ni corazón. De tanto en tanto pasear por estos artefactos extraños limpia un poco la cabeza del cinéfilo.