Cine de la india

El vuelo de los ladrones

De: Ajay Singh

La película cuenta una de esas complicadas y enredadas historias de robos de guante blanco. En este caso los protagonistas son una azafata y su novio, quienes planean un millonario atraco que les permita pagar una deuda urgente que deben saldar si quieren seguir viviendo. Durante la duración de un vuelo deberán realizar la muy compleja operación para concretar el robo de una fortuna en diamantes. Pero cómo si esto no fuera suficiente, durante dicho viaje ocurrirá algo que hará que lo que ya era inicialmente difícil se convierta en una misión practicamente imposible. La película tiene la línea temporal del vuelo y a la vez retrocede con flashbacks para contar cómo se conoció la pareja y cómo llegó hasta el conflicto que los expone al robo. 

El vuelo de los ladrones es una producción de la India estrenada en Netflix a nivel global que cumple con los requerimientos del gusto occidental, quitándole gran parte de la identidad de ese país y, por consiguiente, su encanto. El cine indio nunca había llegado a todo el mundo como lo está haciendo actualmente. En la última entrega del Oscar dos películas de la India se llevaron una estatuilla. Mejor canción para RRR y mejor cortometraje documental para Nuestro elefante bebé. Detrás de esas producciones de consumo general, están apareciendo varios clásicos, hay que estar atentos.

A pesar de la salvedad que hicimos arriba El vuelo de los ladrones tiene varios elementos propios de esta cinematografía, aunque no sea un producto representativo de ese país. En estos días se está estrenando Pathaan (2023) y ese sí es un título bien indio. Pero por eso El vuelo de los ladrones es más fácil de seguir y también permite entender su éxito instantáneo. Una hora cincuenta minutos es una duración breve para los parámetros indios, acostumbrados a que el cine de acción dure, por lo menos, dos horas treinta minutos. 

La historia divertida, siempre un poco exagerada, pero bastante sobria comparada con el resto del cine de su país. Un Bollywood estilo Netflix, para definirlo de forma apresurada. Consigue atrapar, entretiene y, con la complicidad de los espectadores, avanza con vueltas de tuerca genuinas y sorprendentes. Hay detalles que pueden generar cierta confusión en el gusto occidental, pero hay que entregarse y disfrutar. El cierre de la historia está bien y deja un balance positivo. El vuelo de los ladrones es una forma de acercarse de a poco al cine de la India para los que aún no entienden muy bien de que trata esta cinematografía.