“No es una película, es una película hecha para televisión” así arranca South Park: Post-Covid (2021) uno de los especiales de una hora que se estrena ahora en Paramount Plus. La escenas iniciales muestran que Estados Unidos ha superado la pandemia con éxito, pero lo que no dicen es cuántas décadas han pasado. En la televisión la pregunta de un documental triunfalista dice que los chicos de la pandemia están bien. Los protagonistas de la serie ahora son adultos y el futuro, como es de esperarse, apesta.
Poco a poco se van presentando los personajes y Trey Parker y Matt Stone no defraudan, arrasan con todo. El humor está muerto, los chistes ahora son frases que rematan con elogios a las minorías, la esperanza de vida sigue aumentando y está mal visto que los ancianos mueran, por lo que los geriátricos ahora son multitudinarios. La serie capta a la perfección todas las locuras del presente y se ríe con ganas de cosas que son tomadas completamente en serio en todos los medios. Desde siempre South Park jugó al límite y no puede hacer algo distinto ahora. Tan buenos y tan contundentes son los chistes que contar cosas de la trama sería arruinar la experiencia.
Vienen más especiales de South Park, como bien lo deja en claro el final de este, y mientras exista este tipo de comedia, entonces el humor estará a salvo. Parece un lugar común, pero ya no quedan casi ejemplos de libertad como este. Y fuera de Estados Unidos es aún más difícil que se produzcan esta clase de maravillas. Mucha gente dice tener sentido del humor, pero solo muy pocos son capaces de ponerlo en práctica. Los chistes de esta película son sobre cosas terribles, como por ejemplo el daño a la infancia que ha provocado la locura global. No quiero imaginar que hubieran hecho Park y Stone si supieran lo que pasó en Argentina, sin ir más lejos. Aquí nadie sería capaz de hacer una comedia como esta, por otra parte. Para quienes aman el humor en el sentido más puro del término, South Park: Post-Covid es un alivio en medio de estos tiempos imposibles que muchos no quieren que mejoren más.